La visión de los felinos es muchas veces un misterio para nosotros, ya que solemos escuchar frases como: «los gatos ven en la oscuridad» o «los perros y los gatos solo ven en blanco y negro». Lo cierto es que ambas afirmaciones son falsas.
Gracias a las investigaciones tenemos pistas sobre cómo ven los gatos. Se sabe que su visión puede ser parecida a la nuestra, pero ha evolucionado adaptándose a sus necesidades. En algunos aspectos tienen mejor vista que nosotros pero en otros les ganamos.
Vamos a analizar los puntos más importantes de la visión felina.
¿Ven en blanco y negro?
No, los gatos ven también los colores. Pero sí que hay una diferencia respecto a nuestra visión: no ven la totalidad de los colores.
Aquí juegan un papel importante los conos. Se trata de un tipo de célula presente en la retina cuya función es diferenciar colores.
Los humanos tenemos tres tipos de conos que nos permiten ver una gran gama de colores, con picos de sensibilidad en los colores rojo, verde y azul. Sin embargo los conos de los gatos son más limitados.
Los felinos apenas pueden diferenciar el color rojo, por lo que su visión tiende más a los colores azules y grises. Hay quien afirma que también son capaces de ver el amarillo, pero en cualquier caso no podrán identificar el color rojo como un color diferente.
¿Cuál es su ángulo de visión?
El ángulo de visión de los gatos es más amplio que el nuestro y esto les permite distinguir mejor a cualquier animal u objeto que se mueva a su alrededor.
En concreto nuestro campo de visión es de 180 grados, mientras que el de nuestros amigos felinos se extiende hasta los 200 grados. Puede parecer poca diferencia, pero esto les da una gran ventaja frente a otros animales.
¿Ven de forma nítida?
Podría parecer que los gatos ven bien los objetos que se encuentran lejos, pues son expertos cazadores, pero la realidad es muy diferente. Debido al tamaño de sus globos oculares tienen menos músculos en sus ojos comparados con los nuestros, y esto les dificulta dar nitidez a los objetos lejanos.
Mientras que nuestra visión nos permite ver con nitidez objetos que están a 30 metros de distancia, en el caso de los gatos esta distancia se reduce a los 6 metros. Más allá de esta separación comenzarán a verlo todo borroso. Se podría decir que los gatos son miopes.
Pero esto no es lo único: también tienen problema con los objetos muy cercanos. Cuando algo se encuentra muy cerca de su cara les cuesta enfocarlo, por lo que tampoco lo verán con claridad. Pero para compensar esta falta de visión echan mano de sus bigotes.
Los bigotes de los gatos tienen una longitud definida y los utilizan para no chocarse con ningún objeto. Al tener terminaciones nerviosas en seguida detectan cuando el bigote toca algo. Así evitan cualquier golpe.
¿Ven en la oscuridad?
Los gatos no ven en completa oscuridad, pero su visión es infinitamente mejor que la nuestra en condiciones de poca luz.
Esto se debe principalmente a sus pupilas. Se trata de pupilas elípticas con las que son capaces de dejar pasar una gran cantidad de luz. Cuando se encuentran en un entorno oscuro abren sus pupilas al máximo y con ello aprovechan cualquier fuente de luz que haya, por mínima que sea.
Además disponen de una capa de células tras la retina llamada tapetum lucidum. Esta capa, que es la responsable de que sus ojos devuelvan un color dorado o verde cuando se les ilumina, es capaz de recoger más luz.
Ejemplos de la visión de los gatos
En estas imágenes se puede comparar de manera más visual la diferencia entre nuestra visión y la de los gatos. Se trata de un proyecto llevado a cabo por el investigador Nickolay Lamm en el que quiso representar cómo era la visión de los gatos.
Es interesante conocer cómo ven el mundo nuestros amigos felinos. Ahora ya sabes que si te tiñes el pelo de rojo tu gato ni se dará cuenta y que si intentas que te vea cuando te encuentres a más de 6 metros le costará identificar que eres tú.
Excelente lo que acabo de leer. Ahora ya sé que a más de 6 metros o menos de 10 cm. no distinguen bien nuestros amigos bigotones.