Ten cuidado: 20 alimentos que son tóxicos para los gatos

El sistema digestivo de nuestros felinos amigos no funciona como el nuestro.

Lo que para ti es un delicioso aperitivo, podría ser tóxico para tu gato. Y como responsable dueño, tu misión es mantener a tu gato saludable.

En este artículo te voy a desvelar los 20 alimentos que nunca deberías ofrecer a tu gato, desde los menos peligrosos hasta los más graves.

20. Frutas cítricas

Aunque nos pueden parecer refrescantes y deliciosas, para nuestros felinos no es así.

De hecho, odian el olor y sabor de los cítricos, y hay una razón para ello.

Los aceites volátiles, como el limoneno y el linalool, presentes en los cítricos, irritan sus delicadas membranas mucosas.

Si tu gato ingiere limón, naranja, lima o pomelo, es probable que sufra malestar gastrointestinal y molestias en la piel.

Por eso debes tener cuidado con esos difusores de aceites esenciales.

Mejor mantener los cítricos alejados de tu pequeño compañero.

19. Atún

Muchos gatos aman su sabor, pero hay un detalle que quizá no sabías: el atún tiene rastros de mercurio.

Mientras que nosotros, los humanos, podemos asimilarlo en pequeñas cantidades, los gatos no lo hacen tan bien, especialmente si lo consumen con frecuencia.

¿Quieres darle un premio de atún ocasionalmente? No hay ningún problema.

Pero si piensas hacer del atún su dieta principal, piénsatelo dos veces, ya que no es una buena idea.

18. Grasa

Sí, es cierto que los gatos son carnívoros obligados y comen grasa naturalmente.

La diferencia es que en la naturaleza no comerían la misma cantidad de grasa que puede encontrarse en un trozo de carne de vaca o cerdo.

Aunque puede que pienses: «Un poquito no les hace daño», pero la realidad es que al darles restos de comida con grasa en exceso puedes provocarles pancreatitis.

Así que, por más que te miren con esos ojitos, no le des ese trozo de grasa que tienes en el plato.

17. Carne, huevos y pescado crudos

Estos alimentos, si no están bien cocidos, pueden contener bacterias nocivas como la salmonela y la E. coli.

Y esto les puede causar vómitos, diarrea o fiebre.

Además, los huevos crudos contienen una enzima llamada avidina que impide que tu gato absorba vitamina B7, esencial para su piel y pelaje.

Y cuidado especialmente con el pescado crudo. Contiene una enzima que elimina la tiamina, vital para ellos.

Sin esta vitamina, tu gato podría enfrentar graves problemas neurológicos.

16. Comida para perros

Aunque veas que la comida de perro y de gato provienen de la misma marca, ¡no significa que sean intercambiables!

Mientras que los gatos son carnívoros por naturaleza y requieren una dieta rica en proteínas y grasas, especialmente taurina, los perros tienen un paladar más amplio, incluyendo cereales y verduras.

Si decides ofrecerle a tu gato comida para perros, podrías causarle serios problemas digestivos.

Así que es mejor evitarlo.

15. Aguacate

Estos alimentos contienen una sustancia llamada persina, que es segura para nosotros pero tóxica para muchos animales, incluidos los gatos.

Todas las partes del aguacate, desde la pulpa hasta las hojas y semillas, pueden ser peligrosas.

Un poco de aguacate no le hará ningún mal, pero en grandes cantidades, la persina podría causar vómitos, diarrea, pancreatitis y hasta daño al corazón de tu gato.

Además, el aguacate es rico en grasa, y ya hemos hablado de por qué demasiada grasa es mala para ellos.

Así que mejor mantén el aguacate y el guacamole lejos de tu felino.

14. Sal

¿Sabías que un consumo elevado de sal puede causar síntomas en tu gato como vómitos, diarrea y hasta temblores?

Y eso no es todo: un exceso de sodio puede conducir a hipertensión arterial en ellos.

¿Eres de los que comparte patatas fritas o palomitas saladas con tu mascota?

Entonces es mejor que te lo pienses dos veces y mantengas esos bocadillos lejos de sus bigotes.

13. Hígado

Aunque puede parecer un premio delicioso, el hígado contiene altas cantidades de vitamina A, y un exceso de esta vitamina puede ser tóxico para tu gato.

Los síntomas son claros: dolores musculares, sensibilidad al tacto y problemas óseos.

Y ojo, no solo hablamos de hígado de res, sino de carnes de órganos en general.

Si piensas en experimentar con la dieta de tu gato, consulta primero a tu veterinario y evita sorpresas desagradables.

12. Nuez moscada

Esta especia puede parecer inofensiva, pero contiene un componente llamado miristicina que puede ser tóxico para tu felino.

Y estoy hablando de síntomas serios como alucinaciones, aumento del ritmo cardíaco y hasta convulsiones.

Un simple mordisco de una tarta con nuez moscada no será un gran problema, pero si tu gato consume una cantidad más grande, como una cucharadita, podría estar en riesgo real.

Mejor guarda la nuez moscada solo para tus recetas humanas.

Hasta aquí hemos visto alimentos que no son buenos en cantidades excesivas, pero ahora vamos a ir un paso más allá y vamos a ver alimentos que debes evitar por completo.

11. Uvas y pasas

Aunque no se conoce exactamente qué hace que estas frutas sean tóxicas para los felinos, sí que se sabe que pueden causar insuficiencia renal.

Y no estamos hablando sólo de la fruta; productos como el jugo de uva y la mermelada de uva también son un peligro.

Asegúrate de mantener alejados tus cereales si contienen alguno de estos dos ingredientes.

Hasta que la ciencia descubra más sobre estos alimentos, es mejor que tu gato no los ingiera.

10. Lácteos

Olvídate de la imagen mítica del gato con un plato de leche. Es un mito que deberíamos desterrar.

La mayoría de los gatos son intolerantes a la lactosa. ¿Sabes lo que significa? Que leche, queso y otros lácteos pueden causarles malestar estomacal, diarrea y hasta vómitos.

Los gatos adultos producen menos lactasa, la enzima que descompone la lactosa, así que mejor evita esos productos.

Y no solo es una cuestión de digestión; la grasa y el azúcar en la leche pueden llevar al sobrepeso y a la diabetes en tu gato.

Cuidado con esto.

Si quieres darle leche por alguna razón, debería ser la leche de su madre o sustitutos de leche para gatitos, pero nunca leche normal.

9. Levadura

Si te gusta hornear, asegúrate de que tu gato no se acerque a la masa.

¿Por qué? La levadura puede expandirse en su sistema digestivo, causando una acumulación peligrosa de gases.

Su pequeño estómago podría hincharse y retorcerse, lo que podría llevar a una emergencia mortal.

Además, la levadura produce etanol, lo que significa que tu gato podría, literalmente, emborracharse.

Por eso lo mejor es guardar esa masa cruda lejos de las patitas curiosas.

Evitarás accidentes innecesarios.

8. Cebolla, ajo y cebollino

Estos alimentos son como kriptonita para tu gato. Pueden causar irritación en su estómago y dañar sus glóbulos rojos, lo que podría llevar a anemia.

Así que olvídate de compartir esas patatas fritas con ajo o cualquier caldo con estos ingredientes.

Si te gusta cocinar con ellos, asegúrate de que ningún trocito termine en el suelo o en el plato de tu gato.

Es mejor prevenir que lamentar.

7. Huesos

Puede que pienses que, porque cazan ratones y aves pequeñas, los huesos son inofensivos.

Pero los huesos cocidos y algunos crudos se astillan con facilidad.

Estas astillas pueden causar asfixia o provocar serios daños en el tracto digestivo de tu felino.

Entonces, por muy natural que parezca, mejor evita los huesos si no te has informado bien en cómo dárselos de manera segura.

Así mantendrás a tu gato a salvo.

6. Xilitol

Este edulcorante, que puedes encontrar en chicles, dulces y hasta en pasta de dientes, puede llevar a tu gato directo al veterinario.

Consumir xilitol provoca una liberación masiva de insulina en su cuerpo, causando una peligrosa bajada en sus niveles de azúcar.

Los síntomas iniciales son vómitos y letargo, pero pueden empeorar rápidamente hasta convulsiones e insuficiencia hepática.

5. Nueces de macadamia

Al igual que ocurre con las uvas y las pasas, no sabemos exactamente por qué son tóxicas, lo cierto es que lo son.

Y no solo las nueces macadamias, también otros frutos secos como las almendras y las nueces pecanas.

Estos alimentos están llenos de grasas y aceites que pueden provocar vómitos y diarrea, e incluso desencadenar pancreatitis.

Mejor mantenlas fuera del alcance de tu amigo felino.

4. Medicamentos para humanos

Si bien es cierto que esto no es un alimento como tal, es fundamental conocer los riesgos.

Escúchame bien, nunca, y quiero decir NUNCA, le des a tu gato medicamentos diseñados para humanos.

Es una de las causas más comunes de intoxicación en gatos.

Los componentes que parecen inocuos para nosotros, como el paracetamol o el ibuprofeno, pueden ser mortales para ellos.

Así que guarda esos medicamentos en un lugar donde tu gato no pueda acceder, como lo harías con tus hijos.

Y si tu gato necesita tratamiento, consulta siempre con el veterinario primero.

Vamos a ver ahora los últimos tres alimentos que debes evitar que tu gato ingiera a toda costa.

3. Chocolate

A todos nos encanta un buen trozo de chocolate, pero lo que es un placer para nosotros es un gran peligro para tu gato.

Especialmente el chocolate negro o el de repostería, que son altos en teobromina, una sustancia que los gatos no pueden metabolizar.

Incluso una pequeña cantidad, solo 5 o 10 gramos, puede causar síntomas graves como vómitos, diarrea, temblores e incluso convulsiones.

Mantén el chocolate lejos de tu amigo felino, como si su vida dependiera de ello, porque realmente depende.

2. Cafeína

Sé que no puedes vivir sin tu café matutino, pero para tu gato, la cafeína es un peligro mortal.

Un sorbo de café, té o una bebida energética puede desatar un caos en su pequeño cuerpo.

Estoy hablando de estimulación excesiva del sistema nervioso, un ritmo cardíaco disparado y vómitos.

Y en casos graves, incluso podría llevar a convulsiones o la muerte.

Los efectos negativos pueden aparecer en solo 30 minutos y durar hasta 12 horas.

Así que ten cuidado y mantén esas bebidas con cafeína lejos de tu peludo amigo.

Un pequeño lametazo a un resto de café no tendrá mayor problema, pero evita que beba directamente de tu vaso o coma cualquier grano de café que haya podido caer al suelo.

1. Alcohol

Este es el último punto, y uno de los más críticos. Así como tú no le darías alcohol a un niño, nunca se lo des a tu gato.

Aunque para ti un trago pueda ser un placer, para tu felino es veneno puro.

Puede causar desde vómitos y diarrea hasta la muerte, y eso incluye todo tipo de alcohol, no solo las bebidas.

Me refiero a enjuagues bucales, productos de limpieza e incluso masa de pan cruda.

Así que si sospechas que tu gato ha ingerido algo con alcohol, ni lo pienses, llama al veterinario.

Asegúrate de que estos productos estén bien guardados, porque incluso un poco de alcohol puede ser venenoso para tu amigo felino.

No te la juegues con esto, por favor.

Con este último punto llegamos al final del artículo, y espero que esta información te sea útil para cuidar mejor a tu compañero felino.

Recuerda, cada gato es un mundo, pero hay cosas universales que son malas para todos ellos.

Si has estado compartiendo alguno de estos alimentos o sustancias con tu gato, es hora de dejar de hacerlo.

Pero si ya ha pasado y sospechas que tu gato ha comido algo que no debería, no lo pienses dos veces: acude al veterinario de inmediato.

En estos casos, mejor prevenir que lamentar.

Y ahora, quiero que sigas aprendiendo sobre tu gato, y por eso te recomiendo que aprendas cuáles son las 23 señales de dolor en gatos según los expertos.

Así sabrás si tu gato está sufriendo.

Bibliografía: